F1: GP Canadá 2011

— La carrera empieza a las 7, así que acabará a eso de las 9 como muy tarde; luego la ceremonia del podio, la rueda de prensa... y si a Vettel no le da por hablar demasiado llego más que de sobra a mi vuelo, que sale a las 10. Mañana a las 8 estaré de vuelta con el resto de concubinas de Horus.

Ver la lluvia en Canadá significa que se pierden las referencias en uno de los circuitos en los que más duro se frena. Si las frenadas de L'Epingle, el puente de la Concordia o la chicane de entrada a meta (con muro de los Campeones incluido) son un desafío en seco, imaginemos lo que pueden ser con lluvia, frenos fríos y neumáticos de chufla. En efecto, nos lo tendremos que imaginar porque otra vez nos han dejado con las ganas de ver una carrera en lluvia; en cambio, y durante dos horas, nos hemos tragado las imágenes de una parrilla más aburrida que una película española de aquellas que decían dicen "subvencionada por el Ministerio de Cultura".

Y eso que, pese a todo, al final hubo emoción. Vettel perdió su segunda carrera del año contra un McLaren, esta vez el de Button, que pasó nada menos que seis veces por el pit-lane (cinco cambios de neumáticos y un Drive Through cuando excedió la velocidad con el SC en pista) y que jugó al pim-pam-pum contra Hamilton y Alonso, mandando a uno contra el muro y al otro fuera de la pista.

— ... Y si unes con una raya todos los puntos, verás que sale un dibujo de mí celebrando otra pole.
— Mi padre me ha dicho que si te vuelve a ver haciendo lo del dedito, lo de la ministra de Hamburgo va a ser un chiste comparado con lo que te vas a comer tú.

Pero no por conocidos hay que adelantarse a los acontecimientos. Los libres del viernes resentían a Sergio Pérez de su golpe en la clasificación de Mónaco, y el elegido para sustituirle era... ¡tachán, tachán! ¡Pedro de la Rosa! ¿Algún otro comentario desdeñoso de Bobato contra Peter Sauber, el mismo que el año pasado bajó a Pedro del mismo coche? ¡No! Con el tiempo justo para calzarse las botas y ponerse el casco, Pedro se subió al Sauber C30, y, aviso a navegantes, lo hacía mucho más que dignamente.

Ya en la Q1 de clasificación del sábado, Alguersuari caía en el último momento cuando Kobayashi mejoraba su tiempo in extremis. Trulli, Kovalainen, Liuzzi (¡mejor que los Virgin con el HRT!), Glock, Karthikeyan y D'Ambrosio, fuera.

Q2, neumáticos superblandos para todos y la novedad: ahora el compuesto más blando mejora en la segunda y tercera vuelta. Di Resta, Maldonado, Kobayashi, Sutil, Buemi, Barrichello y De la Rosa, fuera de la Q3.

La pole, aunque algunos creían iba a estar disputada, fue para el mismo de siempre. Con pasada de frenada en L'Epingle incluida, Vettel quedaba por delante de Alonso y Massa. Webber era cuarto, Hamilton quinto y Rosberg sexto. Button y Schumacher parecía iban a ser los escuderos, y los Renault, Heidfeld y Petrov, cerraban los diez primeros.

— ¡Esa sonrisa chicosssss! Eso es, con complicidad. Ahora juntaos un poco más, como si fuerais amigossss... ¡Así, así! ¡Dádmelo todo! ¡Dádmelo todo!

La salida que pudo haber sido se quedó en otra estafa a las que nos están acostumbrando cada vez que caen dos gotas. Con el cielo cenizo pero seco, y con la pista húmeda por las lluvias de la mañana, pero no encharcada, la carrera comenzó tras el Safety Car. Y nada de innovar: neumáticos de lluvia extrema para todos. Cuatro vueltas después el SC se iba a boxes y la carrera se lanzaba, con actitud más que timorata por parte de los pilotos de cabeza.

Menos mal que tenemos a Hamilton. El único de la cabeza que no se amedrentó con el agua, no dudó en cogerle el interior a Webber en la primera curva; tanto que el australiano no se lo esperaba y se cerró sobre él. El peor parado fue Webber, que trompeó y perdió posiciones hasta la 14ª, mientras que Hamilton pasó de quinto a séptimo, detrás de Schumacher. Lo siguiente fue que Button perdió la posición con Michael y con Lewis, y cuando Hamilton se emparejó a Schumacher en la frenada de L'Epingle Schumacher le empujó hacia fuera, con lo que Hamilton tuvo que cambiar la trazada, salir por fuera y perder de nuevo la posición con Button.

Con eso vino el otro affair del inicio de la carrera: Hamilton salió de la chicane de entrada a meta mucho mejor que Button y, cuando estaba en disposición de adelantarle frente a su propio box, Jenson le empujaba contra el muro. Ni más ni menos. Mientras que en la repetición se veía a Button echando literalmente a Hamilton fuera de la pista y empujándolo contra el muro, nuestro ínclito Bobato exclamaba que Hamilton era un loco por intentar adelantar.

— ¿Verdad Jenson que tú y yo somos amigos? ¿Eh, eh? ¿Verdad, verdad? Y verdad que cuando rodamos juntos tenemos cuidado y nos dejamos sitio, ¿eh, eh? ¿Verdad, Jenson, verdad?
— Toma claaaaaaaaaarooooo.

Hamilton contra el muro, desllantando la rueda trasera izquierda y bregando con el coche para llevarlo a boxes y cambiar neumáticos. Alguien en el box creyó que dos toques en cuatro vueltas eran demasiados y le dijo a Lewis por radio que tenía la suspensión dañada (efecto óptico por ver una rueda sin goma, algo que, ¡oh casualidad! ya le había pasado al piloto que da nombre al circuito de Montreal como Gilles Villeneuve en Zandvoort el año 1979).

Lewis aparcaba el coche fuera de la pista, y el SC salía a la misma. Lo lógico hubiera sido que cuando Hamilton volviera a boxes, después de haber sigo echado por Schumacher, empujado por Button y parado por alguien del muro, soltara pestes, sapos y culebras por su boca. Pero no. Otro piloto domado. Bravo por la FIA. Conseguirán que los GP de F1 sean más amistosos que una partida de dominó en el bar de Tobías, el hijo de la Petra.

Button entraba a cambiar a intermedios poco antes de que se fuera el SC y no mucho antes de que le sancionaran con un Drive Through por exceder el máximo de velocidad con el coche de seguridad.

— Mira Nick, como últimamente a Vitaly y a ti os gusta mucho daros trompazos, le hemos puesto al volante un botón de eyección del asiento. Pero no te empeñes en darte una leche para salir volando, ¿eh?

Hay cosas que escapan al entendimiento humano. Hay cosas que escapan a la mayoría de los mortales. Hay cosas que son demasiado complejas para alguien que no tiene un doctorado en física cuántica. Pero hay cosas que son de traca, y una de ellas es parar una carrera en cuanto caen cuatro gotas. Sí, luego la pista se puso muy fea, pero eso fue mucho después de que la carrera estuviera detenida.

En el relanzamiento fue el pistoletazo de salida para la remontada de Webber. Tras llegar a estar decimocuarto, en apenas 17 vueltas le había birlado la séptima posición a Heidfeld. Pese a que se temía más lluvia, en Ferrari y Mercedes creyeron que era el momento para que Alonso y Rosberg montaran neumáticos intermedios. Una vuelta después un aguacero caía en la aguja del casino, y Alonso y Rosberg volvían a entrar para montar lluvia extrema.

Por si acaso alguno de los pilotos creía que podía abusar de su talento y adelantar, el Safety Car salía a pista en lo que Vettel y Webber cambiaban sus neumáticos de lluvia extrema. Massa lideraba la carrera pero también entraba a cambiar neumáticos y se colocaba tercero detrás de Vettel y Kobayashi.

Pero todavía faltaba lo más grave.

Decisiones impertinentes, honestidad contra el uso, son nubes que encubren una carrera cuando más verla procuro. ¡Oh clara y luciente FIA en cuya lumbre me apuro! Al punto que te involucres, será de mi muerte el punto.

Sólo se habían disputado 24 vueltas y por obra y gracia de los comisarios aparecía la bandera roja. ¿Algo pasajero? Sí, pasajero, si pasajero se puede considerar un lapso de tiempo de dos horitas, tras las cuales, oh, sorpresa, se volvía a salir detrás del SC. Y eso que ya no llovía. Más de 20 minutos detrás del SC, y en la vuelta 34 se volvía a disputar la carrera.

Tan seca estaba la pista que Schumacher, Sutil, Glock, Barrichello y Buemi entraban a montar intermedios nada más irse el SC. En la vuelta siguiente entraban los de la cabeza: Kobayashi, Massa, Webber, Petrov, Rosberg y Alonso montaban intermedios.

Alonso se colaba claramente a Button en la primera chicane, pero el inglés no cedía el hueco y se llevaba a Alonso por delante. Trompo, golpe contra el muro y Alonso fuera. Otra vez el Safety Car de paseo. Vettel seguía liderando seguido de Kobayashi, Massa, Heidfeld, Di Resta, Webber, Schumacher, Petrov, Sutil y Rosberg en los puntos.

Retirado el coche de Alonso, Schumacher aprovechaba su talento para pasar a Webber y a Heidfeld. En apenas unas vueltas más, en la 50, Schumacher alcanzaba a Massa y Kobayashi, que estaban enzarzados en la chicane del puente de la Concordia, y los pasaba sin más problemas. Massa aprovechaba el desconcierto para colarse a Kobayashi en L'Epingle.

Webber ya había hecho su apuesta arriesgada del día. Montaba neumáticos lisos blandos y volaba para recuperar posiciones. Schumacher, Massa y Heidfeld copiaban al australiano y también montaban slicks. Vettel, Kobayashi y Petrov seguían comandando la carrera.

— Ya tengo la de Karthikeyan, la de Chandok y la de Kubica, y con la de Buemi ya me he hecho fotos con todos los feos de la parrilla.

Massa corría por llegar al podio, y en esas estaba cuando un Hispania se le cruzó en medio de la pista y, por evitarlo, se iba contra el muro y rompía el alerón delantero. Parada en boxes y de tercero a decimosegundo.

Vettel robada, como siempre, líder, seguido de Schumacher, Webber, Kobayashi y Button, que continuaba remontando y pasaba al japonés. Heidfeld lo intentaba en el viraje de Senna, y traccionando mucho mejor que el Sauber acababa por golpear el difusor de Kamui, lo que le descolgaba el alerón delantero y provocaba que se le metiera debajo, con el consabido golpe contra el muro posterior.

Los trozos de Heidfeld hacían que volviera a salir el SC, y unos comisarios más inestables que un presidente del gobierno en un país africano.

— Lewis, ¿te has meado encima?
— Al que vuelva a hacer un chiste con la decoración del mono le mando a mi padre para que chupe cámara.

Todavía quedaba por ver lo mejor de la carrera. Vettel, Schumacher, Webber y Button se habrían de repartir la gloria del podio o la infamia del cuarto puesto.

Webber cargaba con todo, y, tirando de DRS, se pasaba de frenada en la chicane de meta por dos veces. Button, con la caña preparada, sólo tenía que abusar con su mucha mejor velocidad punta y pasar a ambos. Webber aún tendría ocasión para pasar a Schumacher, pero Button ya corría acechando a Vettel.

Recortando un segundo por vuelta a Vettel, Button sólo podía esperar un fallo de Vettel o que sus neumáticos aguantaran más. Era la última frenada en la chicane del puente de la concordia y Vettel, estrujando sus gomas y con Button acechando tras los arbustos, perdía el coche en el primer vértice y se quedaba cruzado en el segundo para ver cómo pasaba el inglés como una exhalación. Sin haber liderado ninguna vuelta, tras pasar seis veces por boxes y habiendo echado a su compañero de pista, Button ganaba a lo épico.

¿Esperábamos algo más? Pues sí. Massa tirando de DRS y pasando a Kobayashi sobre la misma línea de meta.

— Límpiame bien las botas, que voy a ir a saludar a Bobato y como me pregunte otra vez por la previsión meteorológica de McLaren te juro que le meto una patada en el cielo de la boca.

En fin, Button y Webber se han encontrado con carreras que sólo podían afrontar a la ofensiva y han dado la talla sobradamente. Vettel ha afrontado otra carrera en la que debía ser cauto o defensivo según las circunstancias, y sólo le falló la estrategia en las últimas cuatro vueltas.

He leído por ahí que las motos corren con lluvia, hay caídas y nadie se rasga las vestiduras. Si las carreras de motos de esa misma mañana en Silverstone, bajo la lluvia, hubieran sido de F1, ¿también hubieran sacado un SC? Lorenzo se cayó (y perdió el liderato del mundial), Simoncelli se cayó, Spies se cayó... ¿y alguien pensó remotamente en que pudiera pararse la carrera? Sólo tengo memoria de que no se diera la salida en una carrera de Moto GP, y fue en por el diluvio que cayó sobre Qatar en el 2009. Sí, sí, ya sé que cuando pasa un coche de F1 por una pista mojada levanta tres piscinas olímpicas de agua por segundo, pero estamos en lo de siempre: las condiciones son malas para todos. Tanta lucecita parpadeante, tanto panel luminoso y al final si queremos ver una carrera con lluvia tiene que ser en la consola.

Ya sé para qué quería Ecclestone los aspersores aleatorios en los circuitos: para sacar bandera roja y poder ir a publicidad.

Prometiendo que mañana estará lista la foto para el pie del lector, sólo puedo suplicaros y recomendaros que disfrutéis un poco más de esta carrera leyendo los blogs de mis amigos MFAL, J.Arce, F-1 A.L.C., Mai, McKormick, Hiarbas, Noe_Izumi, Jon Valle-Iturriaga, SilF1, David Anaconda, Martín Herzog, Iceman y todos los amigos que están en el blog roll.

La clasificación final:

Posición	Nº	Piloto	Equipo	Vueltas	Tiempo	Parrilla	Puntos
1	4	Jenson Button	McLaren-Mercedes	70	4:04:39.537	7	25
2	1	Sebastian Vettel	RBR-Renault	70	+2.7 secs	1	18
3	2	Mark Webber	RBR-Renault	70	+13.8 secs	4	15
4	7	Michael Schumacher	Mercedes	70	+14.2 secs	8	12
5	10	Vitaly Petrov	Renault	70	+20.3 secs	10	10
6	6	Felipe Massa	Ferrari	70	+33.2 secs	3	8
7	16	Kamui Kobayashi	Sauber-Ferrari	70	+33.2 secs	13	6
8	19	Jaime Alguersuari	STR-Ferrari	70	+35.9 secs	18	4
9	11	Rubens Barrichello	Williams-Cosworth	70	+45.1 secs	16	2
10	18	Sebastien Buemi	STR-Ferrari	70	+47.0 secs	15	1
11	8	Nico Rosberg	Mercedes	70	+50.4 secs	6
12	17	Pedro de la Rosa	Sauber-Ferrari	70	+63.6 secs	17
13	23	Vitantonio Liuzzi	HRT-Cosworth	69	+1 Lap	21
14	25	Jerome d'Ambrosio	Virgin-Cosworth	69	+1 Lap	24
15	24	Timo Glock	Virgin-Cosworth	69	+1 Lap	22
16	21	Jarno Trulli	Lotus-Renault	69	+1 Lap	19
17	22	Narain Karthikeyan	HRT-Cosworth	69	+1 Lap	23
18	15	Paul di Resta	Force India-Mercedes	67	Accident	11
Ret	12	Pastor Maldonado	Williams-Cosworth	61	Spun off	12
Ret	9	Nick Heidfeld	Renault	55	Accident	9
Ret	14	Adrian Sutil	Force India-Mercedes	49	Accident	14
Ret	5	Fernando Alonso	Ferrari	36	Accident	2
Ret	20	Heikki Kovalainen	Lotus-Renault	28	Driveshaft	20
Ret	3	Lewis Hamilton	McLaren-Mercedes	7	Accident	5