De cuándo se le puede llevar la contraria a las mujeres
Pues hete aquí que andaba volviendo a mi casa hace un par de días cuando hube de detenerme en un semáforo a la espera de que se pusiera en verde para poder cruzar. En esto que una pareja, con pinta de pijillos pero no superoseas, de unos 30 ó 35 años y que bajaban por la acera contraria, cruzaron ignorando cualquier señal de tráfico precisamente a la altura del paso de cebra en el que yo aguardaba.
Como un moderno filibustero, pero con bolso de Prada y mechas rubias, me vino a abordar la mujer con algo entre las manos.
—Perdona, ¿me puedes decir de qué color es esto? —me dijo mientras me enseñaba una especie de cinta de tela bastante sobajada, que al principio pensé que era de esas que se usan para llevar el móvil enganchado al cuello, pero que luego clasifiqué como sin utilidad definida.
—A mí me parece naranja. Naranja oscuro, quizás —le contesté reticente, pensando que se trataba de alguna especie de timo, maniobra de despiste o cámara oculta.
En ese momento vi de reojo cómo el varón que la acompañaba, que se había quedado detrás a cierta distancia pero pendiente de la acción, comenzaba a reírse. No a carcajadas; no sonoramente, ni tan siquiera de manera evidente. Pero se reía.
Un frío gélido nos envolvió tanto a ella como a mí mientras los ojos de la mujer se concentraron en los míos buscando posiblemente que me explotara la cabeza, se me saliera el cerebro derretido por las orejas, o me tragara allí mismo una de las zanjas de Gallardón.
—Gracias —me respondió ella tan secamente que cuando tragué saliva sonó como si estuviera rascando un cepillo de púas contra una encimera de mármol.
Mientras yo permanecía, sorprendido, en el mismo sitio, la mujer se fue calle abajo con paso rápido y enojado. Poco le faltó para romper el suelo con la rabia de cada pisotón, y a buen seguro que lo hubiera hecho de haber podido, porque no había visto rabia igual desde que Mike Tyson abandonó el ring.
Cuando ya creía que iba a quedarme sin saber el porqué de todo este affaire, el hombre se volvió, esperó a que se alejara la mujer y, entre divertido y risueño, vocalizó, más en un suspiro que en un susurro:
—Ella decía que es rojo.
Poco me importó el final de la historia. Al fin y al cabo, era él el que se estaba jugando que no le dejaran dormir en su cama esa noche.
Queridos niños: respondiendo al título del post, y por si alguien todavía lo dudaba, la respuesta correcta a cuándo se le puede llevar la contraria a las mujeres, es cuando ellas no lo sepan.
jajajaja q bueno tu tienes un peligro x la calle primero el bolardo y ahora esto jejeje
ResponderEliminarsaludos!!!
Me suena:
ResponderEliminarUna: de qué color es esto?
Yo: ehhh... amarillo?? amarillo oscuro?.. quizás...
Una: No!!!! Me refiero a si es mostaza u oro viejo!!!
Bonito relato amigo Ventu.
ResponderEliminarAcertar con la respuesta adecuada es todo un arte y un riesgo. Si crees que debes mentir, debes responder rapido, sin titubeos:
-Cariño, ¿estoy gorda?
-NO!!
Si dudas, estas muerto.
Totalmente de acuerdo con Hiarbas. Si dudas en la respuesta, adios.
ResponderEliminar-Cari, que zapatos te gustan más, estos o estos.
-LOS DOS SON PRECIOSOS.
No te decidas por uno u otro, no acertarás. Y mucho menos digas que ninguno de los dos.
Por cierto, ¿alguien sabría decir cual es el color fucsia?.
Un saludo.
"cuándo se le puede llevar la contraria a las mujeres, es cuando ellas no lo sepan."
ResponderEliminarxDDDDDDD
MUY BUENO MISANTROPO.
Pero hay otro caso, cuando ella sabe que puedes pasar a otra mujer sin esfuerzo, por eso es una costumbre muy útil tener un harem.
De todas formas para los que seais monogamos el consejo es útil, provechoso, gozoso y pertinente.
Ahora bien también es cierto que a mi se me convence en seguida pues soy de animo liberal, cuando me interesa.
by HORUS a proud degustador del harem
@Mai: Te aseguro que no soy yo el que va buscando problemas, ¡son ellos los que me buscan a mí!
ResponderEliminarComo dice el refrán: "Si da el cántaro en la piedra, o la piedra en el cántaro, mal para el cántaro". ¡Siempre llevo las de perder!
@Rodros, Hiarbas y Fitti: los hombres sabemos que hay 5 colores: el azul, el rojo, el amarillo, el verde y el marrón, que se aplica a TODO lo que no es rojo, azul, amarillo o verde. Luego están el blanco, que son todos los colores juntos, y el negro, que es la ausencia de color.
Las mujeres inventaron nombres como el mostaza, oro viejo, fucsia, o gris marengo con el único propósito de tener una excusa para mandar a sus parejas a dormir al sofá.
@Horus: ¿"los que seáis monógamos"? ¡No lo dirás por mí! ¡Yo tengo una PS3 con un volante!
xDDD
Por cierto, con el vídeo de la muchacha me he acordado de unos mendas que vi una vez en concierto: los Red Elvises. Rusos afincados en California y unos cachondos de cuidado.
En fin, que tenían esta bella tonada... I wanna see your bellydance
Enjoy :)
Obraste sabiamente. Si hubieras dicho "rojo", el tío te había igualado el coche con un impacto de bala en la aleta izquierda.
ResponderEliminarQué cosas te pasan, tío
La moraleja de todo esto es la siguiente: ¿en qué puto mundo vivimos los occidentales que una persona se pilla un cabreo del copón porque su pareja ha acertado con un color y ella no? Con razón los colombianos y los indios figuran como los países más felices. Por cierto, me encanta llevarle la contraria a mi mujer, pero es que soy un poco hijoputa.
ResponderEliminar@Ufo: Tú ríete, pero estoy pensando en hacerle más agujeros a mi coche. Entre la mierda que lleva, los rozones y el agujeraco, los de la Guardia Civil se piensan que soy un gitano y no se atreven a pararme.
ResponderEliminar@J.Arce: No es que seas un hijoputa por llevarle la contraria a tu mujer. Lo que eres es un temerario.
¡Ah! y yo creo que no es que se cabreara porque su pareja acertara el color, sino porque ningún tío del mundo es capaz de distinguir el rojo del naranja.
Me extraña que sólo fuera "rojo".
ResponderEliminarUna discusión que mantengo habitualmente con las mujeres tiene que ver con los colores: con los 16 que existen y los demás, que sólo ven ellas.
¿Gamas? Un hombres saben distinguir dos: vede claro/oscuo y azul claro/oscuro.
¿Rosa palo? ¿Alguien ha visto un palo rosa?
no te creas q no hay tios q no entienden d estas cosas q yo conozco a uno q entiende mas d medias q yo y eso q no se las pone... encima es hetero, s lo q tiene echarse una novia pija q entras n un mundo nuevo y desconocido
ResponderEliminarsi hubieras comenzado diciendo que la cinta era "naranja tomate" o "naranja atardecer" quien sabe y se hubiera acalmado un poco... o hubiera explotado como un ICBM en ruta
ResponderEliminarcada vez que vengo a leer aqui salgo con un poco más de sabiduria de la vida.
Ah, el maravilloso mundo de los colorines!
ResponderEliminarLo que pasa es que teniendo madre pintora, uno no tiene mas remedio que aprenderse algunos...
Con esos nombres tan creativos...
Rosa palo es uno de mis favoritos.
Pero vamos, rosa clarito, cojones.
Yo con lo que lo paso mal es con las compras.
Lo mejor, con los zapatos:
-Te gustan?
-Yo no me los pondria...
y a partir de aqui comienza la fies.
Pero coño, es verdad, si es que no me gustan los zapatos de mujer!
@David: Como dijo un colega mío en otro comentario... "Qué somos, ¿hombres o ratones?"
ResponderEliminarY, parafraseando a otro JRANDE, "cuando oigo hablar de tonos del azul, saco mi pistola".
@Mai: ¿Me estás diciendo que si me echo novia tengo que aprender de medias? ¿O sólo si es pija? A mí si me dice una tía que me compra un Z4 me aprendo todas las referencias del catálogo de Marie Claire. ¡Lo digo en serio!
@F1 ALC: Si hubiera oído antes en mi vida lo de "naranja tomate" te juro que tampoco se lo hubiera dicho.
"Un ICBM en ruta", qué bueno! xDDDD
@Malasombra: Entiendo que no te gusten los zapatos de mujer. Además, con lo alto que eres, si tienes un mal paso puedes acabar en urgencias.
Y, al hilo de esto, un clasicazo: http://www.youtube.com/watch?v=jVmPG2jyQZ8
jejeje te estoy diciendo que yo me enteré por un amigo que las medias iban por espesor y el adquirió este conocimiento saliendo con una pija q estudiaba con el en madrid
ResponderEliminarxa q t compre un Z4 tienes que dar un buen braguetazo jejeje
y si es pija yo me estudiaria el catalogo de la perla no el de marie claire
Varias preguntas: ¿Era falso o verdadero el Prada? ¿de qué color eran los ojos de la chica? ¿tú crees que no durmieron juntos ese día por tal chorrada?
ResponderEliminar-Jonceltic: eeeeeeeennnnnnnn error. Lo que a ti o a nosotros le puede parecer una chorrada, para ellas NO.
ResponderEliminar-Mai: ese tipo de las medias. La presion que podeis hacer con vuestras preguntas es tal, que nos obligais a hacernos expertos en cosas tan raras como en medias, a menos que sea "viajante" claro esta.
-Rosa palo, palo ¿que palo? ¿porque a veces usan palabras tan raras? Como se complican la vida, con lo simple que es....
@Mai: he buscado "la perla" y me ha salido un balneario o algo así.
ResponderEliminarPero luego he encontrado esto y, oye, si por tener un Z4 hace falta que me pase el día viendo fotos de tías en paños menores, ¡tendré que hacerlo! xDDD
@Jonceltic: Lo del Prada es un recurso narrativo. La verdad es que lo vi en un episodio de Padre de Familia, en el que la niña se quería comprar un bolso de esos, pero costaba una pasta, se mete a camarera y se hace pasar por madre soltera para que le den más propinas.
En los ojos no me fijé, pero de mamellas iba bien servida.
En fin, que estoy aquí desvelando mis secretos... xDDD
@Hiarbas: No creo que se compliquen la vida. Es como los tíos que se aprenden las alineaciones de los equipos de fútbol: ellas se aprenden el Pantone completo con nombres técnicos como verde esperanza, azul turquesa o amarillo miel.
El único tono universalmente aceptado por los tíos es el verde moco.
Como diria Florentino:
ResponderEliminarNEVER!! NEVER!! NEVER!!
es el enlace que pones, solo con que mires los precios verás q es para pijos jejeje
ResponderEliminarx cierto los bolsos de prada son más para viejas q lo sepáis jejeje ya decia yo que algo no cuadraba en el relato
yo tampoco distingo esos colores imaginarios tengo mejores cosas en las que malgastar mi tiempo XD
saludos!!!
Una profesora mía, como no tenía nada que enseñarnos, intentó un día demostrar en clase que los hombres no distinguíamos el rojo del granate.
ResponderEliminarLa pobre me preguntó a mí en primer lugar y le chafé el experimento.
He oído Z4?
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