De Irma la Dulce, amores ilegales y odios legítimos
“En el mundo en el que vivimos el amor es ilegal, pero no el odio. Puedes odiar en cualquier lugar, en cualquier momento, y a cualquier persona. Pero si quieres un poco de calor, un poco de ternura, un hombro sobre el que llorar, una sonrisa que abrazar, tienes que esconderte en rincones oscuros, como un criminal.” |
— Irma la Douce (Billy Wilder, 1963) |
Al hilo del post de la semana pasada, me he aplicado la oración por pasiva y este fin de semana me he puesto Irma la Dulce (o Irma la Douce según su nombre original, que suena mucho mejor). Para describir lo deliciosa que es, siempre digo que es una película que cuenta la historia de una prostituta y que pese a ello le gusta a mi madre (no desvelo el final, pero se supone). La semana que viene, El Apartamento.
Una película muy bonita. Un amigo mío dice que tiene el beso más bonito de la historia del cine. (A mí me parece que no es para tanto, pero ya sabes que no me pusieron corazón).
ResponderEliminarA mí estas frases me superan. Soy más de frases en gallego como la de Pulp Fiction...
ResponderEliminarno la he visto a si que me lo apunto en la lista de "cosas por hacer".
ResponderEliminarcomo comentario sólo puedo decir...
"pero porque tanto odio"...(con voz de cálico por favor).
@No a todo: Sigo pensando que cualquier día podríamos irnos a ver al Mago de Oz. Tú pedirás un corazón, y yo pediré un cerebro.
ResponderEliminar@J.Arce: "Bueno, non empecemos a chuparnos as pirolas" xDDDD
@De la Croix: Si no la has visto (que tendría delito), apunta también El Apartamento. Brutal!
¡Uy! Es mejor no pedir. ¿Y si nos lo concede? ¡Quita, quita!
ResponderEliminarY, por cierto, tienes un premio en mi blog.
Un abrazo, Ventu.
Si las mujeres no fueran tan estrechas, no haria falta ir a un rincon oscuro.
ResponderEliminarMas reflexiones:
-El hombre tiene miedo de mostrar sus sentimientos sin que se ponga en duda su masculinidad, por eso busca un sitio fuera de ojos indiscretos.
-La gente no soporta la felicidad de otras personas, asi pues tarde o temprano se buscaria alguna excusa para obligarnos a amar en la intimidad.
Ahora, voy a tomarme la pastilla roja y me volvere normal.
Saludos
@No a todo: A mí no me vendría mal un cambio que otro. ¡Muchas gracias por acordarte de mí!
ResponderEliminar@Hiarbas: Como me dijo un amigo, "hay dos tipos de mujeres, las golfas y las que vuelan".
¡Pásame una de esas pastillas rojas!