De médicos, enfermeras, y otra gente que no me cae tan mal
No me gustan los médicos. Disfruto tanto visitando un ambulatorio como dejando que me claven palillos bajo las uñas de los pies. Y si hablamos de hospitales, entonces la comparación puede incluir partes pudendas, hierros candentes y un manual de la inquisición española.
Mi única visita al médico suele ser la de la revisión médica anual de la empresa, y aún y así lo hago a regañadientes. Si puedo pasar todo el año sin ver una bata blanca, mejor que mejor.
¿Y a qué viene esto ahora? Pues a que, por poco que me gusten los médicos, y por poco que vea la televisión, estoy enganchado a la serie de House. Siempre digo que si en vez de tratar de un médico en un hospital versara sobre un mecánico en un taller de coches, la serie ganaría muchos enteros, y me ahorraría perderme la mitad de las pesquisas (y ahora corred a registrar la idea).
No es difícil imaginar a este Sherlock Holmes del siglo XXI enfundado en un zarrapastroso mono azul preguntando a tres grasientos ayudantes:
— Tenemos petardeo al arrancar, el motor se calienta demasiado si sube cuestas y además, cuando hemos cambiado el líquido de los limpiaparabrisas, ha dejado de funcionar la radio. ¿Alguna teoría?
— Yo creo que es una dilatación excesiva de las camisas de los cilindros impares. Eso explicaría el petardeo inicial, y que le cueste subir de vueltas al subir las cuestas.
— ¡Te olvidas de la radio, rubio repeinado con pinta de invertido!
— Puede ser una derivación del cableado de la instalación eléctrica. Eso explicaría el fallo de la radio y que hayan dejado de funcionar los elevalunas.
— Siempre te vas a lo más fácil, ¿no, rubia de pacotilla? Lo de las ventanillas lo solucionamos hace 3 días, y no tenía nada que ver con el petardeo del motor.
— Puede que sea lupus.
— Desde luego que no, negro pretencioso, ¡no es lupus! ¡nunca es lupus!
¿Y qué pasa con la directora del hospital? ¿Vamos a dejar olvidada a nuestra Cuddy?
Siempre estoy a vueltas con lo mismo: que si soy un misógino, que si son todas golfas (menos mi madre y mi hermana), que si tengo una PS3 o que si la abuela fuma. Pero, en el fondo —demasiado en el fondo, quizás, pero ahí está al fin y al cabo—, me gustan las mujeres.
Claro que no me gustan todas, ni mucho menos. No me harto de repetir que me gustan morenas, italianas y ferraristas. Sí, ya sé que Mónica Bellucci está casada, y no me lo repitáis más porque no me hace ningún bien.
Así que hoy vengo a traer a una nueva moza: Lisa Edelstein. O, más bien, a su personaje en House: la doctora Lisa Cuddy. ¿Será porque soy un hijo de puta insensible como House? ¿Será porque siempre dice lo que House quiere oír? ¿Será porque, en el fondo, esa actitud condescendiente de superioridad mal encubierta es la que me ciega tanto como al propio House?
Cualquiera en su situación se vería obligado a hacer lo que hizo House en el episodio de la semana pasada:
"We can all applaud the doctor who's willing to break all the rules. But the real hero is the unsung doctor, toiling in anonymity, because he broke the rules without getting caught. I need to know you have these skills. I need you to bring me the thong of Lisa Cuddy. Not kidding. Thong. Cuddy. Go."
Queridos niños, he de reconocerlo: con bragas o sin ellas, me mola la Dra. Cuddy.
Enfermos, onanistas, desaprensivos que no sepan apreciar la belleza interior de una mujer y del personaje que interpreta, pueden recoger su botecito y pasar a la habitación 101: http://www.houseisright.com/2008/03/01/for-the-cuddy-fans/
Lo primero recordar que la Belucci está casada (lo digo por tocar los cojones, más que nada).
ResponderEliminarLo segundo, decir que me ha gustado el post, sí señor, y la idea del House mecánico es cojonuda.
Muchas gracias y buena suerte.
Ayer Cuddy salió en 3 míseras escenas.
ResponderEliminarY menos mal que han salvado a la gachís médico maciza de ayudante, porque si llegan a dejar a la fea me da algo (y eso que ya sabía que se quedaba, por aquello de leer las cosas de interné).
Lo mío con la Bellucci es una relación más a futuro.
El mejor ayudante de House fue el dr Proper...
ResponderEliminarQue grande cuando Proper dice lo del Lupus... un buen "inside joke"...
Al Dr. Proper deberían meterloen plantilla. Además, seguro que tiene unas bragas de Cuddy en su casa.
ResponderEliminarPor cierto, en un alarde de estupidez suprema, me he leído el artículo del lupus en la wikipedia y me lo he autodiagnosticado.
Y ya puestos he ido pinchando y creo que también tengo pericarditis, leucopenia, y fotosensibilidad.
Y estoy embarazado.
Ventura, este post ha caido en lo burgués... de una serie de televisión, de una maciza de la serie... muy mal.
ResponderEliminarEsperaba algo más rompedor, algo contracultural... tio, te has vendido al capital.
A mi house me aburre... todos los capítulos son iguales, la misma estructura y las mismas cosas. Pero hay que reconocer que hay escenas muy buenas, lo malo es que navegan en un mar de medianía.
Veo que con mi post te has quedado con lo mismo que con House: lo superficial.
ResponderEliminarNo se trata de lo innovador que seas, sino de lo bueno que sea lo que haces, y ahí House se sobra. ¿Acaso el equipo A no molaba porque era siempre lo mismo?
En House no prima la trama, sino las frases, los diálogos de menos 20 segundos que definen a cada personaje, y cómo intentan manejar al contrario haciendo lo contrario de lo que espera para que haga lo que en realidad quiere que haga.
Yo que tú me dedicaba a ver Betty la fea. Ahí sí que hay giros argumentales y sorpresas a tutiplén.
Y ahora vuelve a tu cueva a ver el pressing catch, que eso sí que es contracultural, o quizás debería decir kontrakultural, para que no te parezca aburguesado.
Totalmente de acuerdo con todo lo relativo a la maciza de Cuddy. Y totalmente de acuerdo con que el hospital y todo lo demás es sólo un mero vehiculo para soltar unas cuantas frases geniales. Lo reconozco, yo tambien soy adicto.
ResponderEliminarjrande, jrande, jrande post, si señor!
ResponderEliminarA mi me gusta mucho la idea de la selección de ayudantes de esta temporada. Ha revitalizado mucho la trama, que se estaba conviertiendo en monotona.
Coño Pakito, ¡vd. por aquí! ¡Cuánto honor!
ResponderEliminarArturo, entre Futurama, Simpsons, Chanante y House, sólo te falta jugar al Gran Turismo y te propongo matrimonio.
Al gran turismo no he jugado porque alguien no me ha invitado :-P.
ResponderEliminar"Tu hacha hizo mi culo"
Me ofende su sarcástico comentario, digno de un doncel de baja estofa y lleno de carencias.
ResponderEliminarQue sepa que los luchadores libres son los gladiadores del SXXI, atletas perfectamente entrenados y preparados para acometer increibles actos de valentía y riesgo... y por si fuera poco beben del circo clásico, de los polichinelas y pierrots que con sus bufonadas entretenían a las cortes européas. Sépalo usted, Ventura.
La lucha libre es un ballet de riesgos calculados y precisas ejecuciones en base a un tempo dictado por los tambores de batalla que sonaban en el medioevo.
De House puedes quitar todo lo del hospital y medicina y quedarte con un tio que putea a otros y va de listo... estoy aún esperando que alguno de los estudiantes coja el bastón y lo mate a golpes cual mr. Hyde de Stevenson.
Me despido de usted con una sonorra pedorreta en su dirección.
Por cierto, un post de gary gigax y el d&d pero ya.
Si tanto desea un post sobre Gary Gigax escríbalo usted mismo y emplee usted su cuenta para publicarlo, que en el último año sólo ha escrito una vez.
ResponderEliminarArturo:
ResponderEliminar¡Mi espada hizo tu ojal!
eso de las series de médicos son una tontá... en los hospitales nunca hay jamelgas y chatungas de ese calibre como para pensar "como vaya con la de mear..." o "ay! si voy, con lo que te doy...." Al contrario, hay trolls de las cavernas con unas jeringuillas que bien se las podían ceder a los Manowar para sus "chows". Que la ves venir y piensas "esta sí que me va a abrir el ojal, sí..." y te agarras hasta a la goma del goteo de duero....
ResponderEliminarbueno niños y niñas de la misantropía, aquí os dejo algo que posiblemente os interese a mas de uno (26 de marzo, ved el video pero "hay que vélo!!")
http://blogs.rtve.es/muchachadanui/2008/3/5/la-segunda-temporada-muy-pronto
Si los del pressing-catch son los gladiadores del siglo XXI que suelten a los leones, a ver qué tal les va. En ese caso me pensaría lo de verlos.
ResponderEliminarPensé que nadie más se fijaba en el morbo que tiene la doctora Cuddy. En la serie me pone, pero en la vida real es mucho más cachonda. No, no la conozco pero he visto alguna entrevista y tiene pinta de ser una golfilla de cuidado.
Juanqui, a mí si me atendiera una jamelga así no me importaría ponerme malito. Bueno, malito ya me pone.
ResponderEliminarJose, siendo todas golfas, no está mal encontrarse a una golfilla :D
Tócame el riff de Sweet Child of Mine: http://youtube.com/watch?v=787LSth6mG0
Aunque lo han quitado de los sitios de videos online, el documental donde esta gachí habla en castellano está disponible en el eMule y similares redes p2p.
ResponderEliminarSolo hay que buscar House Unplugged.
enjoy.